El queso manchego, es sin lugar a duda uno de los productos más reconocidos de Castilla-La Mancha. Conocido en el exterior como “manchego cheese” es considerado un patrimonio de la cultura del mundo.
La elaboración y calidad del queso manchego proviene de la leche de oveja de raza manchega, con una maduración mínima de 30 días, para quesos con un peso igual o menor a 1,5 kg, y de 60 días para el resto de formatos, con un máximo de curación de 2 años.
¿Cuáles son las principales características del Queso Manchego?
Este queso se caracteriza por su pasta prensada con forma de cilindro, altura máxima de 12 cm y diámetro máximo de 22cm. Tiene un sabor fuerte y sabroso, ligeramente acido que en los quesos manchegos curados puede llegar a ser algo picante.
La gran mayoría de queso manchego es elaborado con leche pasteurizada. En el caso de ser elaborado con leche cruda, el queso se denomina “artesano» o “artesanal”.
D.O. Queso Manchego
El queso con D.O. Queso Manchego posee unas características especiales.
- Deben de estar elaborados y madurados en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
- La leche tiene que provenir de ovejas de raza manchega, procedentes de ganaderías que se encuentran registradas en la Denominación de Origen.
3 rasgos para identificar el Queso Manchego.
- En la etiqueta comercial tiene que aparecer que se ha elaborado íntegramente con leche de oveja manchega, además debe aparecer la palabra “Manchego”.
- En el disco de caseína, que es una pequeña señal que se encuentra en la cara posterior del queso y nos aporta la información de cuál es su procedencia, su do y los dígitos de la quesería que lo ha elaborado.
- En la contraetiqueta, que se encuentra adherida a la etiqueta comercial, debe aparecer el logotipo del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Queso Manchego.